17 DE ENERO
NACE BENJAMÍN FRANKLIN
PADRE Y FUNDADOR DE LOS ESTADOS
UNIDOS DE NORTEAMÉRICA
VISIÓN
Y
MISTERIO
Puente Benjamín Franklin sobre el río Delaware
añádase una vela al sol,
ochocientos al veinte;
pase la eternidad bajo los puentes!
César Vallejo
1. Adónde
van
Estados
Unidos de Norteamérica es a la vez una red de carreteras, de pistas y autopistas,
de puentes y senderos que se encuentran y bifurcan.
De
vías que se cruzan y entrecruzan, se juntan y dispersan por lo ancho y por lo
vasto, por lo alto y debajo mediante puentes y mediante túneles.
Por
en medio, por el aire y el subsuelo, llevando y trayendo lo cognoscible e incognoscible,
lo preciso y lo impreciso, lo que es claro y lo que es rareza y es misterio.
Es
impresionante el hormigueo de autos, furgonetas, camiones y tráileres, que
circulan veloces por las pistas y autopistas.
Cada
uno se supone que sabiendo adónde van y lo dudo que, sabiendo a ciencia cierta,
de dónde vienen.
2. Puentes
colgantes
Así
por el puente colgante Benjamín Franklin Bridge, sobre el río Delaware, y une
las ciudades de Filadelfia, Pensilvania, Camden y Nueva Jersey, en los Estados
Unidos.
El
nombre del puente hace honor al padre fundador estadounidense Benjamín Franklin
de 533 metros de longitud, y que al inaugurarse, el 1 de julio de 1926, era el
puente colgante más largo del mundo.
Actualmente
sobre el puente pasa la carretera Interestatal 676, así como la U.S. Highway 30,
en cuya dirección oeste hay que abonar un peaje de 4 dólares para automóviles.
Puente
que, junto con el Betsy Ross Bridge, el Walt Whitman Bridge y el Tacony-Palmyra
Bridge son las vías de mayor importancia de Filadelfia con el sur de Nueva Jersey
3. ¿Cómo
se hizo?
¡Es
increíble el trajín, la avalancha y el hormigueo de transportes! Que van y que
vienen sobre esta estructura de barras, lingotes y columnas de fierro y cables
que lo sostienen.
Y
que zumban y vibran dentro y fuera del planeta tierra.
¡Como
es inmenso el dinamismo y la diligencia con que se deslizan por estas fajas sin
huecos, detenidas y a la vez veloces que son las pistas y carreteras!
¡Sin
rajaduras en sus distintos niveles y desniveles, que suben y bajan como por un
tobogán o millares de ellos!
Todos
alucinantes, fascinantes ¡y todos los antes y después que se quiera!
¿Cómo
se forjó todo esto? ¿Cómo se hizo? ¿En qué tiempo se construyó?
4. La noche
que se avecina
Cada
pista y carretera bordeada de árboles que son acacias, alerces y cipreses,
cuyas copas se recortan en el cielo azulado, o a veces parejamente anubarrado y
sin distingos ni reveses.
Siendo
que en cualquier momento nos cruza por lo alto un puente, o una red de puentes
que van por encima. Y que son Autopistas Interestatales, Carreteras Federales,
Carreteras Estatales y Vías Locales o de Condados.
Senderos
lineales u oblongos, en curva y en línea recta.
A
ratos levantándose y con frecuencia hundiéndose, de acuerdo a la nomenclatura
de las colinas y bajíos, de las planicies y laderas.
Con
el perfil de los edificios y rascacielos al fondo, imprecisos tras la neblina
de amanecer o de la noche que se avecina.
5. Lo real
con lo virtual
Donde
me he sentido lamentablemente perdido, sin saber a qué he venido, y qué
justifica esto o aquello.
Todas
las vías con señales exactas en fondo verde con letras blancas, o en amarillo.
Y letras rojas sobre blanco, fosforescentes.
Que
coincide exactamente con el GPS que nos viene desde una nube suspendida en el
aire y que sabe exactamente dónde me encuentro. Sin dejar de ser y yo mismo
sentirme para mí mismo el más perdido. Y, es más: poseído del más absoluto
misterio.
Indicando
el dispositivo, sujeto muy cerca del timón, con voz uniforme, sin inflexiones,
dudas ni murmuraciones hacia dónde voltear, qué desvío tomar, qué ruta seguir, los
lugares de entrada y salida. Coincidiendo lo real con lo virtual e imaginario
de modo que para nada hay ahora escapatoria.
6. Fiel
con la vida
Coludidos
el mapa y su correlato con la geografía. El código con la vida. La clave con el
enigma que se trata de develar.
Aquí
coincide exactamente lo ancestral con lo utópico. Nada deja de estar previsto, pero
al final como que todo se esconde y se pierde.
Constatando
que para todo hay respuesta, cuando ha desaparecido toda pregunta
Y
yo solo reconociendo tu rostro en la copa de los árboles,
amor mío, aferrado a ti como mi última cuerda, hebra o ovillo que me conduzca
al final del laberinto, tratando de ser fiel con la vida.
Volviendo
a escuchar mil veces tu voz en mis oídos. Atravesado e incurable de nostalgia,
del recuerdo de ti y de salvarme de algún modo.
7. Mil
antorchas
Sin
hacer caso del presente maravilloso sino de lo simple y atávico que viene desde
ti, honda y lejana.
Y
que perdí siendo niño, pero a la cual me aferro con más ahínco, con más
insistencia, con uñas y dientes, como si fuera a caer por un barranco.
Y
que hace más maravillosa la tarde con que el día muere en esta carretera de
vértigo.
Cuando
la noche luce en mil antorchas que semejan el más maravilloso incendio.
Sabiendo desde lejos que te quise, te quiero y te amaré para siempre.
Sabiendo
ahora que la vida es un vértigo. Y que no todo vaya a ser correr para caer al
vacío.
Sintiendo
que venimos de un origen que no tiene origen y que vamos a un fin que no tienen
fin.
Los
textos anteriores pueden ser
reproducidos,
publicados y difundidos
citando
autor y fuente
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
Obras de Danilo
Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San
Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Ediciones
Capulí: capulivallejoysutierra@gmail.com
*****
DIRECCIÓN EN
FACEBOOK
HACER CLIC
AQUÍ:
*****
Teléfonos:
393-5196
/ 99773-9575
Si
no desea seguir recibiendo estos envíos
le
rogamos, por favor, hacérnoslo saber.
No hay comentarios:
Publicar un comentario