1 DE JULIO
DÍA DEL PARQUE NACIONAL HUASCARÁN
LÁMPARA
VOTIVA DE SER
ETERNOS
Danilo Sánchez Lihón
El Huascarán. Vista desde Yungay
1. Visión
onírica
El
Parque Nacional Huascarán fue creado el 1 de julio del año 1975 en razón de su
extraordinaria hermosura.
Pero
también por existir en él una flora y fauna únicas en el mundo, así como por
sus innumerables recursos y extraordinarios y encantadores paisajes.
Es
una maravilla universal, respecto a la cual no existe algo que se pueda
comparar ni en América ni en ningún otro continente.
Ni en
algún otro lugar del mundo, sea en Europa, en Asia, África o en Oceanía.
Donde
la cadena de glaciares sobre la infinidad de verdes de los bosques y praderas, por
el impacto de sus contrastes, logran el efecto de una visión onírica.
Donde
sus nevados tienen el simbolismo de ser lámparas encendidas noche y día.
2. Belleza
idílica
Con
su reflejo que ingresa e ilumina hasta las habitaciones a oscuras, sea con sus
luces directas, naturales y transparentes, o ya sean ilusorias y fantasmales.
Donde
las aguas cristalinas de sus lagunas reflejan cada detalle del cosmos como en un
espejo sideral.
Con
las estrellas titilantes en su fondo arrebolado, como la luna extasiada en sus
aguas simples o espectrales
A lo
cual, ¿qué se puede semejar? Ni los Montes Himalayas del Tíbet y Nepal.
Ni
los Montes Urales que han inspirado páginas memorables de la literatura
soviética.
Ni
los paisajes de volcanes y glaciares de Islandia se le comparan en majestad y
belleza idílica, indescriptible y sobrenatural.
Laguna de Llanganuco, al pie del Huascarán
3. Voces
de alabanza
Ni tampoco
el Gran Cañón del Colorado, colosal y estremecedor, pero hacia abajo y hacia el
abismo, aunque las rocas y las piedras como su floresta lo llenen de matices.
Y el
río que corre en su fondo cambie cada trecho y cada hora de color, desde el
verde esmeralda, el amarillo esplendente y al violeta muriente del atardecer.
Pero
nada tan sublime como es el caso de la Cordillera Blanca en el departamento de Ancash
en el Perú.
En
donde, además, sobre este paisaje de belleza impresionante y sin par, se han
desarrollado culturas sin parangón.
Culturas
de fábula, cuyas cabezas clavas, feroces y enigmáticas siguen vigilando el vano
de sus puertas trapezoidales.
Como
también la explanada de sus plazas ahora desoladas, pero llena de voces,
exclamaciones y alabanzas
4. Hacia
lo alto
Donde
cada rasgo y detalle está imbuido necesariamente de connotaciones sagradas, en
todo y por todo. Y, ¿por qué?
Porque
las envuelve el misterio de un mundo mágico y trascendente, que tienen hacia lo
alto y hacia lo hondo puestas las plantas de sus pies, como sus entrañas.
Tal y
como fueron los huaris, los vicus y, sobre todo, el fantástico Chavín de
Huántar.
Y tanto
esto es así de portento universal, que en diciembre del año 1985 la Unesco reconoció
al Parque Natural del Huascarán como Patrimonio Natural de la Humanidad.
Y
antes el 1 de marzo de 1977 ese mismo organismo le dio el atributo como Reserva
Mundial de Biósfera.
Flora tropical, al pie del Huascarán
5. Ínfimo
e íntimo
Integran la
Cordillera Blanca 663 glaciares, 269 lagunas y 42 ríos conformando el paisaje
más colosal, asombroso y admirable del planeta Tierra.
En donde dominan
y presiden esta inmensa cohorte de dioses, divinidades, apus y huacas, los
nevados Huandoy y Huascarán.
Estos dos nevados,
recostados uno al lado del otro, según la tradición son dos amantes legendarios.
Quienes se
convirtieron en estas montañas sagradas encarnando una tierna e inmensa
historia de amor.
En
donde se da y se retrata lo inmenso como lo pequeño, lo gigantesco e
inconmensurable como lo ínfimo y hasta lo íntimo.
Laguna de Llanganuco
6. Bandera
en el alba
Donde
el sentimiento de lo místico y sagrado es tan natural que el alma permanece
allí ungida, trémula y arrodillada para siempre.
En
donde hay además algo extraño, cuál es la asociación de nevados y lagunas de
témpano, junto a la profusión de bosques y flora de naturaleza tropical.
Lugar
mágico, con un rico, variado y asombroso folclor, representado en ritmos,
danzas y canciones, como compuesto de mitos, leyendas, fábulas, apólogos,
consejas y rondas.
Tierra
sufrida que se ha sobrepuesto a catástrofes que figuran como las más pavorosas
de toda la civilización humana.
Con
una larga historia de luchas populares, con un arte y una literatura sublimes.
Así es esta región gloriosa, una enseña y una bandera en el alba.
7. Lámpara
votiva
Donde
sobre el blanco impoluto de las nieves inmarcesibles crece una vegetación
tórrida y salvaje.
Y en
donde el clima mismo al pie de los nevados no es ni frío ni gélido sino más
bien de un temperamento primaveral.
En
donde sobre el granito blanco y rojizo de las rocas sempiternas se dibujan
lagunas traslúcidas con orillas y parajes de fábula.
Con
iridiscencias de jade y esmeralda que reflejan los nevados de pasmo y prodigio.
Y por donde sobrevuelan mariposas y colibríes sonámbulos e imperturbables.
Así es
el Parque Nacional del Huascarán, que es blasón, medalla e insignia en lo hondo
del alma; y lámpara votiva en nuestra conciencia y sensibilidad de seres
eternos.
PARTICIPE EN EL AULA VIRTUAL CAPULÍ
Sábado 4 de julio. 6 pm. En el día
y la hora haga clik en este enlace:
https://us02web.zoom.us/j/88130118953
Los
textos anteriores pueden ser
reproducidos,
publicados y difundidos
citando
autor y fuente
dsanchezlihon@aol.com
danilosanchezlihon@gmail.com
Obras de Danilo
Sánchez Lihón las puede solicitar a:
Editorial San
Marcos: ventas@editorialsanmarcos.com
Ediciones Capulí:
capulivallejoysutierra@gmail.com
*****
DIRECCIÓN EN
FACEBOOK
HACER CLIC AQUÍ:
*****
Teléfonos:
393-5196
/ 99773-9575
Si
no desea seguir recibiendo estos envíos
le
rogamos, por favor, hacérnoslo saber.
No hay comentarios:
Publicar un comentario